Seattle, tenemos un problema

Más aventuras en el lado oscuro del dominio público. Nuevo momento «Houston, tenemos un problema» en nuestras incursiones en el mundo de la edición digital y las plataformas de venta. A lo largo del mes de marzo preparamos laboriosamente una edición ilustrada del libro Lady Nicotina de James M. Barrie (1860-1937), el autor de Peter Pan (laboriosamente, por la dificultad de combinar imágenes y formato electrónico). Una vez acabada, la subimos a Amazon a principios de abril.

Al cabo de pocos días y dentro de los plazos normales, constatamos que estaba disponible en la tienda de Amazon.com, en la que sólo se puede comprar desde los Estados Unidos. Pensamos que, por un «efecto de goteo», no tardaría en estar en las demás tiendas y en ser accesible desde el resto de países. Sin embargo, han pasado los días y hemos descubierto que Amazon considera que Barrie es autor de dominio público en los Estados Unidos, pero que no les consta que lo sea en el resto del mundo. En fin, volvemos a entrar en el circuito de la correspondencia transatlántica.

Quizá —sólo quizá— la confusión pueda deberse a la compleja situación de los derechos de Peter Pan, cuyo copyright Barrie cedió en 1929 al Greater Ormond Street Hospital, un hospital infantil londinense.

Tumba de James Matthew Barrie (1860-1937) en el cementerio de Kirriemuir, Escocia. Foto: KemnayScot (licencia CC)

Barrie murió en 1937 y según la legislación británica del momento (que seguía la Convención de Berna de 1886 y su establecimiento de cincuenta años tras la muerte del autor para la entrada de una obra en el dominio público), los derechos patrimoniales en relación con esa obra habrían expirado tras la medianoche del 31 de diciembre de 1987. Sin embargo, impulsada por su esposa Audrey Callaghan, presidenta del consejo de administración del hospital, el primer ministro británico Jim Callaghan aprovechó la Ley de Copyrights, Diseños y Patentes de 1988 para extender los derechos de explotación del hospital con respecto a la comercialización de esa obra o sus adaptaciones.

El tratado de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual sobre Derechos de Autor concluido en 1996 extendió a setenta los cincuenta años de protección. En el Reino Unido, los setenta años rigen desde 1996, y en la legislación comunitaria desde 1993 (directiva 93/98/CE ), con un texto revisado en el 2003 (directiva 2006/116/CE).

El hospital afirma que posee los derechos de Peter Pan hasta 2023. Como se ve, el asunto es algo confuso, pero la confusión se circunscribe a esa obra de Barrie.

En resumen, nuestro libro no es Peter Pan, sino Lady Nicotina, una obra con cuyo título no parece que un hospital infantil pueda albergar mucho interés en ver asociado su nombre. Además, según la legislación europea e internacional actualmente vigente, el plazo para que una obra pase al dominio público es de setenta años tras la muerte del autor. Y, como se señala por quinta vez en esta entrada, Barrie murió en 1937. Señor Jeff, porfa, no nos haga las cosas más difíciles.